En un vuelo en 2001, Sujal Mahbubani se rompió el coxis. Tras años de dolor, la terapia EFT, el yoga y el Pilates cambiaron su vida.
En febrero de 2001, cuando trabajaba como asistente de vuelo en un trayecto de Hong Kong a Japón, Sujal Mahbubani sufrió una caída a más de 10.000 metros de altura que le provocó la fractura de coxis. El dolor era tan agudo que no podía moverse sin sentir una punzada en la pierna por la presión del hueso sobre un nervio.
Según contó en una entrevista con el South China Morning Post esa lesión le cambió la vida y precisamente fue la medicina alternativa lo que la llevó a encontrar una solución que la medicina científica no estaba logrando darle por completo.
Esta es su historia.
Años de calvario entre médicos y fisioterapeutas
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Lo que ocurrió en unos segundos impactó los años siguientes de Mahbubani. Entre médicos y sesiones de fisioterapia, su día a día transcurría enfocado en mitigar el dolor.
"Recibí asesoramiento para el manejo del dolor y la depresión y me recetaron Prozac y Valium para el insomnio", recuerda Sujal Mahbubani sobre los años posteriores al accidente que le causó una lesión en la espalda durante un vuelo.
"El cóctel de medicamentos que estaba tomando me provocó aumento de peso, depresión y preocupación sobre si alguna vez mejoraría", relata. Incluso llegó a tener pensamientos suicidas debido a la desesperanza.
Sólo consiguió reincorporarse a su trabajo de azafata en tareas administrativas, lo que aumentaba el tormento al tener que sentarse durante horas. Encima, le detectaron problemas de tiroides, sumando más obstáculos a su calvario.
Un parto sin dolor tras una vida con dolor
Para graficar su resignación al dolor, cuando quedó embarazada de su segundo hijo tras el accidente, estuvo un día entero de trabajo de parto sin notarlo siquiera. Por precaución ante los analgésicos, no tomó ninguno durante la gestación y pasó la mayor parte postrada en cama.
"Los médicos se sorprendieron al ver que estuve de parto durante un día sin darme cuenta", relata.
De los opioides a la técnica de liberación emocional (EFT)
Descubrir cómo eliminar su dependencia de los analgésicos se convirtió en su principal motivación. Gracias a la recomendación de una amiga, empezó a practicar la Técnica de liberación emocional o EFT (por sus siglas en inglés Emotional Freedom Technique), una terapia alternativa que utiliza la acupresión para aliviar el estrés y los antojos entre otros síntomas.
"Progresé lentamente y en el camino, alrededor de 2007, me convertí en practicante de EFT cuando encontré algo de fuerza para dejar lentamente todos mis medicamentos sin ningún síntoma de abstinencia", explica Mahbubani.
La dedicación de Mahbubani también la llevó a convertirse en practicante de EFT y a explorar el yoga más profundamente. Se embarcó en un curso de formación de profesores de yoga, una tarea desafiante dada su condición, pero su perseverancia dio sus frutos.
Su interés por el yoga se vio impulsado aún más por el deseo de ayudar a sus hijos, que padecían alergias, lo que la llevó a especializarse en yoga para niños. A pesar del costo físico que estas prácticas tuvieron en su cuerpo, la resiliencia de Mahbubani brilló.
Hoy, Mahbubani dirige sesiones de yoga en el United Services Recreation Club en Kowloon y continúa explorando diversas técnicas de curación.
El yoga, camino a la transformación
El yoga se cruzó también en su destino como bálsamo para el dolor. Se formó como profesora y, a pesar de las reiteradas recaídas, pudo completar el curso en dos años cuando normalmente se hace en uno.
Incluso aprendió yoga para niños, con el objetivo de ayudar a su hijo con alergias de forma más natural. También se especializó en otras terapias energéticas como el Método Yuen o Havening para liberar emociones mediante estímulos sensoriales.
"Me concentré en técnicas de sanación energética para ayudar a sustentar mi vida y ayudar a otras personas que, como yo, tienen tantos problemas", afirma.
Con constancia y dedicación, Mahbubani fue transformando su vida. "Aunque tengo problemas de tiroides, inflamación de la espalda y dolor de cadera, además de problemas para dormir, mi mensaje es leer esta historia y saber que la transformación es posible", asegura convencida.
Y pone como ejemplo una foto que se tomó hace poco con amigas, luciendo unos tacones rojos. Un símbolo de los pasos agigantados que dio pese al pronóstico de no poder volver a usar ese tipo de calzado jamás.
La historia de Mahbubani es de transformación y esperanza, y demuestra que el cambio interno es posible con compromiso y disciplina.
Su mensaje es claro: nunca dejes que nadie dicte tus capacidades y busca siempre formas de sentirte mejor, por pequeña que sea. Su experiencia sirve de inspiración para otras personas que enfrentan dolor crónico, demostrando que con perseverancia, la curación y una mejor calidad de vida están al alcance de la mano.
Su lema ahora es: "Nunca te rindas".
